Informe Semanal de Política Exterior

DUELO DE DRONES Y MISILES

En el conflicto entre Ucrania y Rusia, con la diplomacia aún paralizada, el panorama bélico muestra hoy un marcado contraste entre el frente terrestre y lo que sucede en los cielos. A pesar del agotamiento por ambas partes, la actividad en el ámbito aéreo se ha intensificado. Aunque las tropas invasoras mantienen la iniciativa estratégica, sus avances son mínimos. La llegada del otoño determina que ya no cabe esperar que su ofensiva de verano produzca cambios relevantes. Las tropas rusas ni siquiera han completado la toma de la ciudad de Pokrovsk, ni han sido capaces de controlar ninguna localidad importante en ninguno de los cuatro oblasts –Lugansk, Donetsk, Zaporiyia y Jersón– que pretenden incorporar definitivamente a Rusia, junto a la península de Crimea. Los choques directos entre las unidades de combate de ambos bandos no han reducido su intensidad, pero ni Ucrania consigue recuperar territorio de forma significativa , ni Rusia logra romper las líneas de defensa ucranianas. Moscú acumula unas crecientes pérdidas humanas –- se estima que en lo que va de año superan los 10.000 muertos mensuales– y ya se vislumbra en el horizonte la necesidad de llevar a cabo una nueva movilización masiva para refrescar y relevar a las unidades de primera línea, todas ellas muy desgastadas. Por el contrario, es en el aire donde la actividad se ha incrementado significativamente. Rusia ha optado por aumentar la utilización de drones y misiles no solo contra objetivos militares, sino también de manera indiscriminada contra población civil (incluyendo cada vez más frecuentemente los ataques a trenes de pasajeros). Contando con el apoyo que le prestan tanto Irán como Corea del Norte y la creciente capacidad productiva de sus propias empresas de armamento, las sanciones internacionales no le han impedido hasta ahora mantener su apuesta bélica. La novedad, en todo caso, viene del lado ucraniano. Kiev ya había demostrado su capacidad para atacar en profundidad el territorio ruso, empleando drones. Seguir leyendo